Berazategui se convirtió en el lugar, donde un hombre de 70 años, dueño de un maxikiosco, encabezaba una red de pedófilos que junto con una pareja abusaban, corrompían y prostituían a menores de edad y a cambio daban comida.
Madre y padre de varias menores de edad entregaban a sus hijas, menores de edad a un almacenero que manejaba una red de pedofilia y cambio de las menores les ofrecía comida.
En una de las viviendas se detuvo a dos personas y se rescató a ocho menores de edad, quienes ya se encuentran a resguardo y con contención psicológica.
El fiscal de la causa, Daniel Ichazo, sostuvo que “investigamos si hay más víctimas del almacenero”. Hasta el momento son dos menores abusadas.